domingo, 2 de septiembre de 2007

Línea roja

"Las cosas realmente importantes se escriben con rojo", dijo mi madre mientras firmaba su acta de matrimonio.
Años más tarde, escribí con labial una proposición seria a mi siquiatra. Fue en la puerta de su consultorio y rematé con un lindo corazón technicolor. El doctor Zambrano, tan gallardo siempre, me correspondió. Con el mismo color escribió sobre mi expediente: BORDERLINE