Puti-turismo

Aunque Dharta insista en no escribir sobre putas, en tiempo de elecciones es cuasi imposible. Capitalizar el morbo "coahuilero" para atraer el turismo a Tijuana, ha sido desde siempre (sí, desde siempre míster Piñera) una premisa económica. Nada esencialmente "tijuanense" (váyanse a la mierda todos los defensores de la ciudad bonita [sic], los amedrentados buscadores de la identidad pérdida, los detractores del positivo-negativo efecto de la migración a estos lares) se ha convertido en ícono sino es por medio del lucro.
¿Pruebas? No, no muchas, pero el post de Daniel Salinas (pulse aquí) me pareció efectivo.

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Creí que el Reloj Monumental por lo menos le servía a las sexoservidoras de la Coahuila. Con sólo asomarse a la ventanita 20x20 cm de su hotelucho podrían calcular el tiempo que llevaban en el servicio y exigir el pago correspondiente al cliente en turno, nada más fuera de lo real. El reloj es absolutamente invisible desde cualquier ángulo de la ciudad.