domingo, 18 de mayo de 2008

¿Y el limón?


El espíritu de compartición (nop, no es ninguna pinche palabra inventada chéquenle en la güeb) de JC se hace cada vez más ostensible. Recién me ha pasado el cd tributo (¿?) a Serge Gainsbourg, Monsieur Gainsbourg: Revisted, me sorprende que dentro de los títulos que recoge el material del polémico padre de Charlotte Gainsbourg y ex esposo de Jane Birkin, no esté Lemon Incest. En fin , cuestión de gustos.
Je t'aime, la canción que haría famosos los jadeos de la Birkin, cantada en inglés es salvada de una mala traducción por Catpower (lo siento pero en francés suena más xosa), aunque me hubiera gustado más que Feist la hubiera cantado y no Boomerang 2005 (Comme un boomerang, originalmente), aunque el resultado es simplemente pegajoso. Marianne Faithfull/Sly and Robbie son los más arriesgados en todo el Revisted, habrá quien le apueste al tema que adaptó Brian Molko (Requiem for a Jerk/ Requiem pour un con) pero el resultado me pareció mediano, ni siquiera suena a Placebo, aunque sale del paso en su versión de Ballade de Melody Nelson. Mención honorífica recibe Jarvis Cocker y Michael Stipe en Je suis venu te dire que y L' Hôtel particulier respectivamente, ambas superan en la interpretación desde mi reaccionario punto de vista, al propio Gainsbourg.
No es raro que Jane Birkin después de acertar con su compilatorio Rendez-vous, cante junto a Franz Ferdinand, su melódica y agudisísima voz dio paso a susurrantes intervenciones en Sorry Angel. Carla Bruni en Ces petits riens... es muy Carla Bruni.
Las demás canciones no me llamaron tanto la atención, tal vez porque esperaba un bonus track escondido de Lemon Incest o ya de perdis Initials BB without Bardot.

En Youtube aparece una entrevista friqui sobre su relación elektrosa con Charlotte, está cagadísima.

1 comentario:

_ dijo...

Me resulta tan perverso como bizarro.
:)

En esos tiempos las drogas eran más depresivas, no cabe duda

Interesante que la cámara tome distancia generalmente y se ubique detrás de las columnas. Lo hace sentir a uno un verdadero fisgón.

Y que ella abra la almohada y se saque plumas blancas. Bueno, poesía sin cojones.

El otro punto es la dicotomía. El hombre desnudo en el torso y la niña en sus piernas.

La cintura divide el pecado según los sexos

Se que tiene otro sentido tu post, pero joder: me mató el video.