jueves, 5 de noviembre de 2009

Mantuvo a su marido, retuvo

En el lugar donde ahora trabajo hay una tipa que se acaba de poner implantes mamarios.
Lo grotesco no es que camine como si hubiera dado a luz a un elefante, sino la forma, según ella me lo platicó, la forma en cómo reunió el dinero para hacerse la cirugía.
El motivo hasta me parece tenuemente tierno, según ella, con esas tetas amplificadas al fin su marido podría prestarle más atención a ella que a su secretaria.
lastimosamente el marido, era desempleado y en efecto, salía no con su secretaria, sino con la de su ex jefe.
Total, la pobre mujercita, la compañera de trabajo, no la secretaria, vendió galletas y chocolates en la escuela de su hija, dejó de ir al cine, a tomar café y hasta de comprar su dotación de calcio. Además de alimentar, dar techo y vestido al marido infiel desempleado
Pa no hacer el cuento largo, çon su sueldo de burócrata de empleada municipal, la mujer terminó de abonar el último pago, descalcificada, con unas tetas horribles y deformes, pero al fin, retuvo a su marido, perdón, mantuvo.

No hay comentarios.: